48 horas

48 horas, ese es el tiempo que te doy para salir de mi cabeza, o acoplarte definitivamente en mi corazón. Necesito ayuda, una especie de señal que me guíe, que me ayude a resolver el eterno dilema razón vs corazón; este corazón que no deja de preguntar por ti; este corazón que añora tus caricias, tu sonrisa, tus labios cerca de los míos, que te añora a ti…Porque tu eres dulzura, ternura, cariño, pero a la vez eres locura….y esa mezcla de dulce locura es exactamente lo que necesito en estos momentos, cosa que otros son incapaces de darme o quizás me lo dan y no se recibirlo porque mi cuerpo si está, pero mi alma no. Mi alma está viajando, se encuentra junto a la tuya, allá donde las materia se descompone, y las estrellas se transforman en estrellas fugaces, esas que tienen una respuesta para cada momento y a su vez te dan la ilusión de pedirles un deseo…Pero ahora mismo mi cuerpo no sabría que deseo pedir; aunque mi otro yo creo que lo tiene bastante claro.

Un ducha de agua fía, con música de fondo para ver si me despejo, no ha sido suficiente…aquí me tienes, con la oreja de van gohg en la radio, y yo sentada en mi cama, con el boli y el papel en la mano, haciendo el decimotercer intento de despejarme, otro intento de recibir esa señal que me haga aclarar algo…pero es que cierro los ojos, y estas ahí, y estoy ahí, estamos los dos, riendo, hablando y acariciándonos a escondidas. No quiero despertar, quiero quedarme ahí, en ese sueño, que se detenga el tiempo y me quede atrapada en el otro mundo, en la otra dimensión, porque cuando despierte, cuando vuelva a este mundo, volverá el dilema…porque tu eres corazón, pero no razón.

¿Por qué ahora? ¿Por qué no hace un mes? Supongo que por el dichoso destino que ha querido que justamente ahora, te conviertas en IMPORTANTE. Y se que te ha puesto ahora con algún fin, para que aprenda algo, pero no se exactamente el que…

48 horas, eso es lo que tienes

Diciembre de 2007

al final, venció la razón