miércoles, 23 de julio de 2008

A veces necesitaría tocar tu mano....

LAURA...

Laura salió de casa sin rumbo fijo. Era una noche cerrada y oscura, solo iluminada por la farola del final de la calle. Comenzó a andar, pensando en todo lo que le había sucedido en los ultimos dias, unos dias que habían estado cargados de emociones y sentimientos que se juntaban en su cabeza y hacían que nada mas pudiera entrar en ella. Por un lado, las nuevas personas que habían entrado en su vida, q en muy poco tiempo se habían convertido en alguien esencial para su dia a dia; aquel muchacho de ojos claros, con el que tantos buenos momentos estaba viviendo, con el que diariamente necesitaba hablar para estar mas tranquila y al que todas las noches le decía te queiro al despedirse d el; y su amiga, aquella muchacha con ese acento tan especial que tanto encanto y carismo tenía. Por otro lado, no salía de su cabeza aquel chico, Gabriel, con el que tantas veces había soñado, y al que tanto necesitaba a su lado, necesitaba su voz, en su cabeza y necesitaba el brillo de sus ojos para continuar con fuerza..xro q solo se kedaba en eso, solo en un sueño. Mientras, Laura seguia caminando, y sin ser consciente de sus pasos, llegó al parque donde tantas veces había pasado con sus amigos y con Gabriel, se sentó en el banco, donde pasaba las tardes hablando y con la mirada fija en el chico, y vio algo escrito en el asiento, reconoció la letra de Gabriel al instante, y akellas palabras grabadas en el banco, llegaron a su mente en cuestion de segundos... " A veces necesitaría tocar tu mano Laura, xq acerlo, significaría que ya no estamos perdidos cada uno en una orilla del río..."

GABRIEL..

Gabriel colgó el teléfono. Cogió su bufanda y su chaqueta verde y salió de casa. Estaba atardeciendo, necesitaba pensar, necesitaba ordenar sus ideas, puesto que cada vez le costaba mas trabajo decirle te quiero a Violeta , la chica con la que compartía su vida desde hace ya mas de un año; y es que desde un tiempo hacia aca, nada era igual. Ya no se divertía estando a solas con Violeta, no le apetecía besarla, no la deseaba como antes…algo estaba pasando en Gabriel, algo que quizás tenía nombre propio, pero que el no quería ver. Caminó casi veinte minutos, sin parar, con un nombre que cada vez sonaba mas en su cabeza, pero que el intentaba borrar. Cruzó la calle y llegó al parque, a ese parque donde cada vez mas le gustaba estar, donde compartía risas y lágrimas, buenas y malas noticias, pero donde sobre todo, compartía aquellos momentos que se adueñaban de su cabeza cuando hablaba con Violeta… esos momentos en los que entre muchas palabras cruzadas con sus amigos, en su mente había silencio, solo silencio y una imagen, la imagen de aquella chica que siempre se sentaba en el banco, rodeada de sus dos mejores a migas: Aurora, a la que muchos confundían con una extranjera por su larga melena rubia natural, pero que era lo mas saleroso que podías encontrar en muchos kilómetros a la redonda; y Carla, con la que nevara, lloviera o hiciera sol siempre siempre podías contar con ella. Esa chica la que se sentaba en el banco donde el estaba sentado ahora mismo, se estaba apoderando de sus pensamientos, y era ella a la que de una manera inconsciente esperaba haber encontrado sentada en el banco. Cerró los ojos, respiró profundo y se dio cuenta de que aquel lugar aún olía a su perfume. Ya hacía frío y la noche estaba muy oscura. Gabriel estaba descubriendo cosas que no quería que apareciesen, así que decidió volver a casa y volver a esa farsa en la que se estaba transformando su vida, no sin antes convertir aquel banco, en el principio de su nueva realidad. Cogió sus llaves y escribió en el banco " A veces necesitaría tocar tu mano Laura, porque hacerlo, significaría que ya no estamos perdidos cada uno en una orilla del río..."

LAURA Y GABRIEL

"A veces necesitaría tocar tu mano Laura, porque hacerlo, significaría que ya no estamos perdidos cada uno en una orilla del río..." Cuando Laura leyó aquello, se quedó sin palabras, no sabía que hacer. Gabriel había dejado alli un mensaje, un mensaje donde ella siempre se sentaba..ahora que? que significaban aquellas palabras? Laura cerró los ojos, y se perdió en sus pensamientos...Gabriel iba volviendo a casa, pensando en Violeta y pensando en Laura. Por un lado la estabilidad de una pareja, la monotonía y los momentos que ya habían vivido y por otro lado la dulzura, el encanto, las sonrisas, las miradas y TODO por delante q le quedaba con Laura. Se paro en seco, y justo en ese moemento sonó su movil. Un mensaje decía: " Yo te dejo tocar mi mano y te ayudo a cruzar el río". Gabriel comenzó a correr, Laura estaba en el banco, tenía que verla, no sabía que iba a hacer ni que iba a decir, pero tenía que verla. Al fondo el parque, al fondo la persona que no podía sacar de su cabeza...Laura notó que había alguien cerca, pero aún siendo de noche, y estando sola en el parque, se sintió protegida. Miró a su izquierda, y allí estaba él, sus ojos se clavaron en los de Laura con mas fuerza que de costumbre. Gabriel se sentó junto a Laura, solo los separaba el mensaje escrito en el banco. En silencio se dijeron todo lo que se tenían que decir y Gabriel tocó la mano de Laura...



Historia con historia.

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